Reconozco que mi amor
es solo idealización irracional.
Bien, lo entiendo, pero para mi
el tuyo podría ser solo comodidad.
Seguiré cayendo una y otra vez al abismo negro
radical, libre, de la fantasía, huyendo.
Mientras la lluvia y el viento,
en una tormenta de invierno,
golpean una ventana cerrada
elegida quizá al azar por la visión de un sueño.