Dedicado a Marta
14 mayo 2017
Fuimos a un restaurante oriental, en un gueto chino de Madrid
Pedimos el plato estrella, y nos trajeron pez-dragón,
Yo comí el ojo de su mente. Que me perdone el ojo
de lagarto de la serpiente.
En aquel día confluyeron
las vidas de todos los que estuvimos allí.
Algo mágico ocurrió, sueños extraños,
decisiones importantes, sentimientos de dolor…
ante todo lo que nos estaba ocurriendo…
Y darnos cuenta de que la vida iba pasando…
y el poderoso espíritu de la muerte
comenzaba a acercarse a nuestras vidas, implacable,
para confirmarnos que nada tenía sentido…
que la vida era una fantasía solamente.
No se por qué estamos vivos,
pero se que sólo nos tenemos los unos a los otros,
vamos a dejar de pelearnos,
este mundo lo van a heredar nuestros hijos…
Vamos a dejarles algo un poco bello
para que lo disfruten.
Luchemos contra nuestros monstruos
cada día
Dejemos de compararnos a ver
quien es mas listo, quien es mas culto
quien es mejor…
No conozco la razón de
las bifurcaciones del cerebro, y el efecto
que hacen en él las drogas.
Pero de una cosa estoy segura
Todos tenemos exactamente el mismo
cerebro, todos tenemos la misma
capacidad intelectiva y creativa,
pero nuestras experiencias
nos hacen diferentes, incluso antes de nacer.