Reseña publicada en La Playa de Madrid, febrero 2013
El postimpresionismo constituye la conexión entre el arte moderno impresionista y las vanguardias de primera mitad del siglo XX: expresionismo, simbolismo, puntillismo, fauvismo…
La historia del arte dio sus ultimas pinceladas adormecidas para renacer de nuevo con mayor fuerza y belleza, abordado por artistas como Paul Cezanne, Gauguin, Van Gogh, Seurat…
Así como el paso que dio Cezanne fue un paso decisivo para la aparición del cubismo, Van Gogh tuvo que pasar por el postimpresionismo para llegar al expresionismo, y los experimentos con la mezcla óptica de la pintura puntillista de Seurat, y el contacto de los colores puros y complementarios de Gauguin suponen una renovación de la teoría del color.
La fundación Mapfre, que también ofrece en la misma sala la exposición Luces de Bohemia, pone a disposición del visitante pinturas cedidas temporalmente por el Musée d´Orsay, de estos y otros artistas .
Es bien irónico que aquellos a quienes les parece una payasada el arte actual se refugien en esta exposición, cuando en su época se consideró pintada por fieras furiosas, o algo nabi -profecía y magia-, o un producto de la locura.
Es arte reciclado, pues vivimos en una sociedad que es un As domesticando y transformando la libertad de un lobo en la mansedumbre de un chihuahua. // Teresa Irisarri